Siempre estamos leyendo libros de viajeros y quizá ningún libro deje de tener ese impulso hacia lo extraño, lo desconocido, aun si lo que guía al viajero narrador es un impulso científico. En la lectura no se ausenta nunca el delicado vértigo que exige proclamar lo ignoto, tan vasta es la idea de viaje y tan plástica a prestarse a todo juego metafórico.
Los artículos aquí incluidos han sido redactados por distinguidos investigadores que, con generosidad, se sumaron al proyecto. Este libro es fruto del esfuerzo mancomunado de muchas instituciones bibliotecarias estatales y públicas del país, que han coordinado una labor exhaustiva y relevante, que los viajeros de los nuevos tiempos que sobrevengan –aunque pasen siglos quizás– podrán considerar con igual melancolía e interés.